Existe una sensación de vacío cuando comenzamos a comer más saludable. Nos piden que por favor comamos tres veces al día con pequeñas colaciones entre comidas, pero esas colaciones suelen ser bocadillos saludables que al comerlos parecen no hacerle nada a nuestro voraz apetito. Antes, una deliciosa bolsa de papas fritas era más que suficiente para sentirnos satisfechos por horas y ahora parece que nada puede equiparar ese sentimiento.

La razón está en todo lo que esas deliciosas pero traicioneras papas tienen en su interior. Un estudio en Reino Unido, uno de los países que más consume papas fritas –su población hoy las consume tres veces más que en 1974- demostró que consumir constantemente este producto duplica la posibilidad de muerte, y no es difícil encontrar el por qué.

Síndrome de obesidad

Muchos alimentos incrementan las posibilidades de ser obeso, pero las papas fritas se llevan las palmas. Una onza de papas fritas de bolsa tiene 10 gramos de grasa y 154 calorías, siendo uno de los alimentos que más está ligado al incremento de peso.

Presión arterial

Las papas fritas también son ricas en sodio, pero no de una buena manera. Con cerca de 120 o 180 miligramos de sodio por onza, una bolsa de papas fritas tiene más sodio del que deberíamos consumir por día, suma el resto de lo que comes en un día y verás el peligro que esto tiene para tu salud. El incremento de sodio en el cuerpo está ligado a problemas cardiovasculares que incrementan la posibilidad de ataques al corazón.

Alto colesterol

¿Sabes por qué una papa frita sabe tan delicioso y con sólo unas cuantas te puedes sentir satisfecho? Es por que son freídas durante un tiempo exagerado, absorbiendo más y más aceite y creando así grasas trans, pues además del tiempo que pasan así, también son freídas con grasas saturadas. Todo esto está asociado con niveles altos de colesterol que tampoco son buenos para tu sistema cardiovascular.

Las papas fritas pueden causar adicción. Su sabor y consistencia hacen de ellas un bocadillo perfecto que podemos encontrar en cada esquina y siempre es parte de lo que acompaña a la comida chatarra, pero también son responsables por el incremento en la obesidad de todo el planeta en los últimos años.

Consume más comida saludable. Puedes transitar de papas fritas a papas horneadas, al principio no te parecerán la gran cosa, pero si esto te ayuda a transitar de la comida más insalubre a algo mucho mejor como vegetales horneados, sabrás que vale la pena.