Alimentación
28/11/2019
Alimentación
El chucrut o sauerkraut es un excelente probiótico, prebiótico y digestivo. Aporta fibra y cuenta como una porción de verdura de las cinco que debemos ingerir diariamente. Si no lo estás comiendo tanto como quieres, prueba con estas ideas.
El sauerkraut es uno de los fermentables más conocidos y antiguos del mundo. Ya el escritor romano Cato en su “De Agri Cultura” lo nombra como una forma común de preservar los alimentos en el 160 AC. A lo largo y ancho del mundo y las culturas, algo se mantiene firme y nos une a través del tiempo y la distancia: los fermentados o fermentables.
Estos productos nos ayudan a estar saludables, ya que aportan probióticos y prebióticos que alimentan nuestro segundo cerebro, el intestino, y nos ayudan a prevenir algunas enfermedades mentales. Pero para lograr los beneficios que estos alimentos reales nos aportan, es necesario consumirlos diariamente. Para esto hemos recopilado estos tips que te ayudarán a incorporarlos a tu día a día.
La mejor forma de comer el chucrut es crudo, sin cocinar, pero si su sabor te parece fuerte, puedes lavarlo. Para esto, tomamos unas cucharadas de chucrut y las ponemos en un recipiente con agua fresca. Esperamos unos minutos y enjuagamos. Con el agua se irán las sales y el vinagre.
Puedes agregar las verduras del chucrut lavadas a un smoothie verde, con tus frutas y vegetales favoritos. Una combinación exquisita es dos cucharadas de chucrut lavado, un puñado de espinaca lavada, dos bananas maduras y una taza de frutos rojos congelados. Licuas dos minutos, ¡y listo! Si gustas, puedes agregarle un poco de menta para darle un toque refrescante. Queda cremoso, rinde dos porciones y no se siente el gusto del chucrut para nada.
Sin lavarlo, puedes picarlo fino y usarlo con su vinagre para armar una vinagreta para tus ensaladas. Dos cucharadas de chucrut picadas, dos de su “jugo”, y dos de aceite de oliva son un buen comienzo. Puedes agregarle un poco de mostaza o algo de ají si te gusta el picante.
Si bien se recomienda comerlo crudo, es mejor consumirlo cocido que no consumirlo. Agregar sauerkraut “lavado” poco antes de terminar de cocinar huevos revueltos o tortillas es una buena forma de incorporarlos a tu dieta si te apetece algo salado.
Puedes hacer guacamole con sauerkraut lavado. Prepáralo como lo haces habitualmente y agrega el chucrut lavado picado bien fino. El crocante de la cebolla, lo jugoso del tomate y lo cremoso del aguacate o palta quedan muy bien con el ligero ácido de este fermento. ¡Es una excelente opción para los que gustan de snacks y quieren comer chucrut crudo!
Como ves, hay muchas formas de incorporar el chucrut en la dieta. Estas son solo algunas. Recuerda que siempre es mejor hacer algo simple que no hacerlo.
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