Agricultura de subsistencia: un modelo más amigable con el planeta

La agricultura de subsistencia es una práctica que se lleva a cabo desde tiempos muy antiguos y aún existe en la actualidad. De hecho, al menos el 25% de la población mundial, sigue utilizando este tipo de actividad, sobre todo, en los países latinoamericanos. También es común en parte de África, la India y en el sudeste de Asia. Se trata de un modelo más amigable con el planeta y que tiene una gran variedad de beneficios.

Muchas personas optan por ella, ya que les permite obtener cultivos para su consumo propio. Es decir, ya no tienen que dirigirse a ningún establecimiento para adquirir alimentos como vegetales y frutas. Al mismo tiempo, ayudan al planeta, puesto que este tipo de agricultura es un modelo más amigable para el mismo.

¿Qué es la agricultura de subsistencia?

Se conoce como la práctica en la que se obtienen diversos cultivos para el consumo exclusivo del agricultor y su familia. Durante el proceso, solamente se produce la cantidad necesaria de alimentos, puesto que es para el autoconsumo. Es decir, se descarta por completo la comercialización de los productos obtenidos con fines de conseguir cualquier beneficio económico.

Asimismo, no utiliza herramientas ni tecnología avanzada en ninguno de los procesos. Todo lo contrario, se caracteriza por el uso de herramientas primitivas con un rendimiento muy bajo.

En este sentido, la agricultura de subsistencia es proceso de cultivo en el que el agricultor se encarga de la plantación, cuidado y recolección de los alimentos directamente de la tierra. Todo con un único objetivo, alimentar a su familia y a sí mismo. La cría de animales para la obtención de carne y otros productos derivados, también forma parte de este tipo de agricultura.

Por otro lado, su implementación ha sido clave en la lucha contra la hambruna en varios países. Con la agricultura de autoconsumo, los productos que se obtienen son limitados, incluso, el cultivo de las plantas suele hacerse entre una o dos veces cada año.

Los alimentos que se obtienen por medio de este tipo de agricultura, por lo general, están limitados al consumo del propio agricultor. En otras palabras, los excedentes suelen ser prácticamente escasos. No obstante, en caso de ocurrir, el agricultor puede comercializar o intercambiar dichos alimentos en los mercados o con agricultores vecinos.

A pesar de las carencias evidentes en herramientas y maquinarias para llevar a cabo la agricultura de subsistencia, los cultivos obtenidos son 100% orgánicos. Ya que la falta de capital, impide que los agricultores adquieran pesticidas y productos fertilizantes. Del mismo modo, las semillas que se obtienen no se someten a ningún proceso de modificación genética, lo que las hace más aptas parar el consumo humano.

¿Cuáles son los tipos de agricultura de subsistencia?

Aunque se trata de uno de los sistemas de cultivo más básicos y antiguos de la humanidad, existen varias maneras de practicarlo. Dichas forma se conocen como tipos de agricultura de subsistencia, a continuación te mostramos cuáles más utilizadas:

Itinerante o por cremación

Se trata de uno de los tipos de agricultura por subsistencia más utilizados, sobre todo, en zonas que requieren que los suelos sean fertilizados sin el uso de productos químicos. De hecho, también se le conoce como agricultura migratoria, puesto que los agricultores solamente trabajan estas tierras durante ciertas temporadas. Luego de esto, las dejan abandonadas por largos periodos de hasta dos y tres años.

Esto permite que las tierras que se usan para el cultivo puedan “descansar” y así, recuperar todas sus propiedades y fertilidad. Además, después de quemar toda la maleza y arboles no deseados, las cenizas de estos se convierten en abono natural para el suelo. Las cenizas también funcionan como pesticida para ciertos insectos y malas hierbas, ya que es itinerante.

Extensiva de secano

En este tipo de agricultura, el proceso de riego no es realizado por el hombre, en este caso se usa el agua que proviene de la lluvia. Dicho método permite cultivar diversas plantas en terrenos semiáridos en los que la tierra tiene la capacidad de observar grandes cantidades de agua de lluvia. Por lo que se trata de suelos que no necesitan mucho riego, lo que es ideal para determinados cultivos.

Este tipo de agricultura de subsistencia es muy popular en varios países, sobre todo aquellos que se especializan en cultivos mediterráneos. Puesto que, las plantas que se escogen se adaptan perfectamente a terrenos de este tipo.

Irrigada del arroz

Muy popular en Asia, la irrigada del arroz es un tipo de agricultura intensiva que se lleva a cabo desde tiempos milenarios. El riego proviene de la lluvia generada por los intensos vientos monzones, lo que permite a los agricultores obtener una cantidad muy abundante de agua para sus cultivos.

Huertos urbanos

Como su nombre lo indica, se trata una técnica de agricultura que se lleva a cabo en las ciudades. Las cantidades de alimentos que se obtienen a través de los huertos urbanos no suele ser muy grande, por lo que también se le considera un tipo de agricultura de subsistencia. Cuando se desarrollan de forma adecuada, los huertos urbanos pueden llegar a ser muy beneficiosos. No solo para los agricultores, también para el cuido del medio ambiente.

¿Cuáles son las ventajas y desventajas de la agricultura de subsistencia?

Su implementación tiene muchas ventajas, no obstante, existen también ciertas desventajas. A continuación, te mostraremos lo bueno y lo malo de este tipo de agricultura, conocida por ser amigable con el medio ambiente:

Ventajas de la agricultura de subsistencia

A pesar de tratarse de uno de los métodos más antiguos, la agricultura de subsistencia cuenta con un gran número de ventajas. Las más importantes son las siguientes:

• Los alimentos que se obtienen a través de esta práctica, son mucho más sanos y nutritivos.
• Se pueden cultivar una gran variedad de especies de plantas en un mismo espacio.
• Se trata de un tipo de agricultura muy beneficioso, especialmente, para los países menos desarrollados.
• No requiere de inversiones muy altas, todo lo contrario, con pocos recursos se obtienen los productos necesarios para alimentar a la familia.
• No importa si el área de cultivo es reducida, ya que este tipo de agricultura se puede llevar a cabo en zonas pequeñas.
• Los cultivos no son rociados con fertilizantes o productos químicos perjudiciales, por lo que son más aptos para el consumo humano.
• Además de obtener una gran variedad de alimentos, los agricultores también consiguen semillas sanas para seguir con el cultivo de las plantas.
• Al tratarse de alimentos de autoconsumo, no se necesitan medios de transporte para su traslado.
• Otra de las grandes ventajas de la agricultura de subsistencia, es que no daña al medio ambiente.

Desventajas de la agricultura de subsistencia

Si bien es cierto que la agricultura de subsistencia es muy beneficiosa, también existen ciertas desventajas en su implementación.

• En comparación con otros tipos de agricultura, el nivel de producción es realmente limitado. De hecho, los productos obtenidos solo son suficientes para el consumo de propio agricultor y su familia.
• Se necesitan muchas horas de jornada laboral para llevar a cabo esta práctica y la mayoría de las labores se hacen por métodos manuales.
• No utiliza maquinaria pesada, herramientas modernas ni tecnología en ninguna de las distintas etapas del desarrollo de los cultivos.
• No se obtienen ningún beneficio económico con los cultivos obtenidos a través de este tipo de métodos. Todo lo contrario, casi nunca hay excedentes de alimentos, ya que los mismos son muy limitados.
• Dependiendo de la temporada, los cultivos pueden ser atacados por diversas plagas e incluso, por los cambios bruscos del clima.

¿Cuál es la importancia de la agricultura de subsistencia?

La agricultura de subsistencia es de gran importancia en la actualidad, sobre todo para los países con mayor índice de pobreza. De hecho, según la FAO, al menos las tres cuartas partes de toda la producción de alimentos mundial, se produce por medio de este método. Si bien es cierto que, a nivel económico, no genera muchos beneficios, puede proveer de alimentos sanos a las zonas más necesitadas.

Por otro lado, al no implementar dispositivos ni herramientas que pueden llegar a ser contaminantes para los cultivos, el medio ambiente también se beneficia. Esta es una de las razones por las que de la agricultura de subsistencia una de las más importantes para el planeta.

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Fuentes: Guía de jardinería, Agrosolmen, Hablemos de culturas.