Está apunto de terminar el año, y es hora de tener nuevas metas. Pero con estos propósitos no sólo puedes comenzar el siguiente año sintiendo que lograste mucho el último mes y cambiar tus hábitos para siempre, también podrás ver el fruto de tu trabajo el próximo año

Este propósito te hará darte cuenta que nuestras acciones, por más pequeñas que lo parezcan, siempre son a largo plazo. Un año después puedes encontrar el cambio de forma casi insignificante, pero tangible, sin embargo, en diez o veinte años te darás cuenta que en un día hiciste algo que puede durar décadas. 

3 de diciembre: Cultiva una planta

¿Te animas?

También puedes leer:

Planta un árbol

"Plantar un árbol es mucho más que un gesto. Si cada ser humano plantara sólo uno, la vida de este planeta y la de sus habitantes mejoraría. Es una manera de amarnos y de amar el entorno, de agradecer todo lo que la tierra nos da".  Son palabras del escritor y presentador español David Cantero. Desde un gesto con la naturaleza, un gesto político y social, la acción de hacer crecer un árbol por iniciativa propia nos transforma de por vida

Se trata de una acción que debemos procurar, pero que tampoco depende de nosotros para siempre, por lo que al principio debemos hacerlo a la perfección para dejar que la naturaleza haga su trabajo y cuando regresemos a ver a nuestro pequeño amigo, haya crecido como lo esperamos. 

Trabaja la tierra

Normalmente puedes comprar pequeñas plantas que están listas para ser plantadas y convertirse en grandes árboles en el futuro. Lo mejor es visitar zonas de reforestación en las que existen espacios designados para los árboles, pero también lo puedes hacer en el patio de tu casa. Lo primero que debes hacer es cavar un hoyo de aproximadamente 40 centímetros cuadrados y 40 centímetros de profundidad. 

Coloca el árbol

árbol

Con mucho cuidado retira la bolsa que cubra la tierra en la que está el futuro árbol, utiliza tus dedos para tomar la parte más baja del tallo y colócalo en la cepa sin tocar la raíz. Asegúrate que el límite entre la raíz y el tallo quede a ras del suelo y se pueda colocar la tierra de forma correcta. 

Compacta

Cuando el árbol haya sido depositado correctamente, asegúrate que la tierra esté compacta, pero no demasiado para que así al regar la planta, el agua pueda llegar a la raíz y nutrir de forma integral al árbol para que pueda crecer sin demasiada ayuda humana. Lo mejor es plantarlo en época de lluvias para que reciba la mayor cantidad de nutrientes, pero no olvides cuidarlo en época de sequía para que no muera el primer año. 

Cada día publicaremos un nuevo propósito que te enseñará a ser más sustentable. Son acciones que puedes adoptar por un día, unos meses o toda la vida, pero que ayudarán a que vivas de manera sustentable y transformes tu vida mientras transformas el mundo.