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Te guste el fútbol o no, el mundial es algo de lo que nadie puede escapar. Y aunque muchas personas después de los partidos prefieren concentrarse en las cosas negativas, como las peleas entre aficionados, la burlas raciales y más, hay otros que reviven los momentos más esperanzadores.
Siempre hay momentos emotivos en los eventos deportivos a nivel mundial, pero es Rusia 2018 cuando son más necesarios que nunca. Con países alejándose de discusiones diplomáticas, crisis de migrantes y más, no se trata de ignorar esos hechos, sino de demostrar que hoy más que nunca, estos eventos demuestran que todos somos seres humanos.
No al racismo
Aunque la foto que está dando la vuelta al mundo está recortada, esta es la versión completa en la que un jugador de Polonia ayuda a un jugador de Senegal a levantarse para continuar el partido. El contraste de piel existe, pero el apretón de manos simboliza que no importa que estén compitiendo, están ahí para ayudarse. Fuera de la cancha existen muchos comportamientos anti-éticos, pero estos jugadores son el ejemplo a seguir.
Ayudar cundo sea, donde sea
En muchos lugares del mundo puedes ver los partidos en pantallas gigantes, pero en Rusia los aficionados que viajaron por todo el mundo y no consiguieron entrada para cierto partido se congregan fuera de los estadios. Así es como un fan egipcio en silla de ruedas que no pudo entrar a ver jugar a su partido fue levantado por manos mexicanas y colombianas para que pudiera ver las pantallas sin que nadie lo tapara. Aquí puedes ver la imagen y su historia.
Un ejemplo a seguir
"Un buen huésped trae felicidad a la casa" dice un viejo proverbio ruso y vaya que los japoneses y senegaleses lo han demostrado a diferencia del resto del mundo. Tras sus partidos, los aficionados se quedan a limpiar el estadio. Esto es una prueba de que un pueblo organizado y con conciencia cívica puede lograr mucho. ¿Cuántas veces no has ido a un concierto o un partido y al salir notas toda la basura en el piso? Estas acciones ayudan a que las calles sean más limpias, evitan que las coladeras se tapen en época de lluvias y en general hacen de su hogar un mejor lugar.
El futuro está aquí
La última sonrisa que hemos tenido seguramente es gracias a un grupo de niños uruguayos celebrando un gol durante el mundial. A pesar de su tierna edad, celebran con la pasión y el corazón de un hincha de 40 años. Esto es lo que demuestra que el fútbol puede unir a la gente más allá de lo que creemos.
Aún quedan muchos días para que termine el mundial, pero existen muchas historias dignas de contar. Debemos dejar de cuestionar la bondad de la gente y mejor replicarla, ser el ejemplo que queremos ver y así, poco a poco, cambiar la forma de pensar de todo el mundo.
