Pedir disculpas puede llegar a ser una de las acciones más difíciles que podemos emprender alguna vez, pues requiere que nos traguemos el orgullo y admitamos que estuvimos equivocados, algo para nada fácil para muchos.

Sin embargo, nuestra capacidad para ofrecer una disculpa sincera depende de nuestra personalidad y otros factores. Pero incluso cuando pedimos una disculpa, es posible que lo hagamos de forma deshonesta y la persona que la recibe no confíe en que realmente estamos arrepentidos y pidiendo perdón.

Es por eso que el cómo pides la disculpa es tan importante como el hecho de pedirla. Estos son 7 errores comunes que muchos cometen cuando ofrecen una disculpa, y que debes evitar a toda costa.

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Excusas

Hay muchas y no muchos no dudamos en usarlas. Para pedir perdón solo hay que aceptar los errores propios, no buscar excusas. Diane Gottsman, experta en etiqueta dice que para que la otra persona cierre sus heridas, "aborda la cuestión y reconoce que tus acciones se pasaron de la raya. Examina con cuidado qué papel jugaste en esa equivocación”.

Por otra parte, Lizzie Post, colaboradora del podcast argumenta que, aunque puedes dar contexto de cómo pudieron haber sucedido ciertos eventos, ese contexto no debería anular tus disculpas.

Aparentar hipocresía

No nos referimos a serlo de verdad, sino más bien a dar la impresión de serlo. Post afirma que “si no muestras de primeras una actitud sincera, no te va a ir bien”. De esta manera, Post aconseja practicar la disculpa de antemano para sentirte seguro con las palabras que salen de tu boca.

Post asegura que la gente suele equivocarse bastante al momento de disculparse impulsivamente, diciendo cosas como “Si necesitas una disculpa, claro que me disculpo, lo siento”, que sería algo así como “Dame un respiro y vete”, y parecer poco auténtico. Solo generará más desconfianza.

Hacerlo por mensaje de texto

No hay nada como estar frente a frente. Las disculpas son asuntos personales y necesitan del contacto directo. “Tienes que poner toda tu atención cuando te disculpes y dejar la tecnología fuera de la ecuación”, comenta Gottsman, y añade “Un post en las redes sociales no es lo mismo que una visita de corazón. Deja que la otra persona escuche tu voz y vea tus expresiones faciales. Un mensaje de texto es la última opción en lo que respecta a expresar remordimientos sinceros”.

También sugiere otras herramientas "cara a cara" como Skype y FaceTime en caso de que la presencia no pueda ser posible.

Fuente: Law Practice Today

Decir ‘pero’

La experta en etiqueta internacional Jacqueline Whitmore asegura que los peros son tal vez la peor forma de pedir disculpas. “Cuando usas la palabra 'pero', lo que haces es negar o cancelar todo lo anterior que hayas dicho. Generalmente se entiende como una señal de que la parte realmente importante está por venir”, asegura Whitmore.

Aunque las intenciones de disculpa sean honestas y bienintencionadas, debes admitir tus errores, de lo contrario tu disculpa puede sonar algo así como “Lo siento de verdad, pero no es lo que pretendía hacer”, sugiere Whitmore.

Culpar a la otra persona

Según Gottsman, un "lamento que te sienta así" invalida automáticamente toda la disculpa y lo anteriormente dicho. En lugar de eso, sería más conveniente un “Disculpa mi comportamiento. Estuvo mal y me gustaría disculparme”. La humildad es la clave en esos momentos.

Pedir disculpas demasiado apresurado o demasiado tarde

Whitmore aconseja disculparse lo más pronto posible para ahorrarte dolores de cabeza, ya que esperar demasiado puede empeorar la situación. Por otra parte, Post asegura que las disculpas apresuradas pueden ser también problemáticas, ya que “a veces la gente necesita un par de minutos para enfriarse, y si alguien está intentando perseguirla para disculparse, no va a funcionar”.

Las expertas concuerdan en que sería mejor analizar el contexto y averiguar cuál es el momento ideal para decir “lo siento”. Para Gottsman nunca es demasiado tarde.

Esperar un perdón inmediato

Disculparse es un gran paso personal, pero no todo el daño hecho será olvidado tan rápidamente. Gottsman recomienda no esperar un perdón inmediato. “Puede llevar más tiempo del que te gustaría, pero al hacer lo correcto, ya has puesto las cosas en movimiento”.

El tiempo puede curar muchas heridas, es importante dejarlo actuar. “Normalmente estamos tan ansiosos por llegar al punto de reconciliación que olvidamos que se necesita tiempo para que alguien se sienta mejor y se produzca la reconciliación. No va a ocurrir exactamente en el momento de la disculpa”, asegura Post.

Las reconciliaciones requieren tiempo, pero si te disculpas con sinceridad y no has cometido una falta imperdonable para la otra persona, la reconciliación llegará tarde o temprano.

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Fuente:

Huffington Post