Brassier, brasier, bra, sostén, sujetador o corpiño; no importa cómo le digas, esta prenda femenina fue patentada en 1914 por Mary Phelps y está basada en los antiguos corpiños que utilizaban las mujeres, estos últimos datan incluso de la antigua Grecia. 

El sujetador o brasier es una de las prendas íntimas a la que más atención prestan las mujeres (y los hombres). Sin embargo no siempre es la más cuidada ni la más limpia.

¿Cuál es su función?

Sujetar y proteger. Estas son las principales funciones del sujetador, como la misma palabra ya lo dice. La glándula mamaria es un órgano que carece de músculos y que, por tanto, tiene escasos mecanismos de fijación.

Va apoyada solamente en los músculos pectorales a través de unos ligamentos que no son muy potentes, que son los ligamentos de Cooper y es un tejido fibroso que necesita un agente externo como es el sujetador. Con el tiempo, estos ligamentos se rompen y la piel se va cayendo, sobre todo si no se usa esta prenda.

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¿Cada cuánto deberíamos lavar los sujetadores para evitar problemas?

Cuando hablamos sujetadores, no estamos correctamente informados de su uso. Son prendas que usamos diariamente pero muchas veces elegimos la talla incorrecta. También nos equivocamos a la hora de lavarlos, lo hacemos mal y con muy poca frecuencia.

Tampoco queremos decir que tengas que lavarlos cada vez que te lo pones ya que podría dañar su elasticidad, algo esencial para proporcionar el soporte adecuado, pero deberías hacerlo cuando te lo hayas puesto 4 o 5 veces.

Este es un número aproximado ya que depende de tu nivel de actividad. No es lo mismo si sudas mucho, ya que entonces, por ejemplo si hiciste ejercicio, necesitarás lavarlo de inmediato.

¿Sigue cumpliendo su función después de lavarlo muchas veces?

Nos acostumbramos a lavar mucho esta prenda y después a seguir usándola, pero el sujetador deja de realizar su función cuando se ha utilizado y pasado por la lavadora en exceso. Cuando veamos que los tirantes y la copa ya se han vencido y no sujetan, deberíamos deshecharlo.

Uno de los errores más comunes de las mujeres es que meten los sujetadores a la lavadora junto con la demás ropa. Debido al ritmo acelerado de vida, pareciera ser la opción más viable. Lo ideal sería que estas prendas se laven con un detergente especial para que las telas vuelvan a su estado original y no pierdan elasticidad para el soporte.

Qué hacer entonces

Si no hay otra opción mas que lavar en máquina, mete el sostén bajo un ciclo de lavado a mano o de prendas delicadas. Para ello cierra las prendas y mételas en una bolsa de malla. Después de lavarlo, déjalo secar al aire libre. No es recomendable usar secadoras.

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¿Usar el sujetador inadecuado puede producir enfermedades?


El uso inadecuado de esta prenda no provoca enfermedades de ningún tipo. Es verdad que puede causar lesiones, tanto en la espalda como en los hombros; dejarnos marcas o durezas, pero todo esto remite cuando se lleva el sujetador correcto.

Según el experto Francesc Puertas: “La mitad de las consultas por dolores mamarios se evitarían usando el sostén adecuado”. “Llevar un sujetador inadecuado no tiene nada que ver con el cáncer de mama. Lo que sí puede ocurrir es que se den mastalgias o dolores de pecho, que se producen por esta razón en el 50% de los casos”.

En conclusión, si vas a usar un sostén, verifica que dé libertad de movimiento al cuerpo y posibilidad de respiración. Si la prenda es muy ajustada, las glándulas mamarias podrían verse obstruidas e incapaces de liberar sustancias tóxicas que se generan en el organismo.