Los gatos son uno de los animales más queridos por la gente en todo el mundo, sobre todo por aquellas personas que pasan muchas horas fuera de su casa ya que son animales muy independientes.

La adoración de los gatos en los hogares lleva muchísimos años de historia, como en el Antiguo Egipto. Sin embargo en el último tiempo, con las redes sociales, se hicieron protagonistas absolutos, junto con los perros, siendo símbolos de admiración y ternura, además de inteligencia. Y esto continuará por muchos años más.

Y es que se dice que los gatos son seres superiores, o por lo menos así se perciben, y dominan a quien tengan delante, incluyendo a los humanos que los adoptan y acogen en sus propios hogares.

Son los animales ideales para personas que trabajan mucho y que se encuentran poco en sus casas, ya que los gatos son mucho más independientes que los perros, por ejemplo. Se limpian solos, no necesitan que los saquen a pasear y disfrutan de sus momentos a solas.

Aunque por mucho tiempo se los ha tomado como símbolos de frialdad, distanciamiento y de ser bastante ariscos con sus humanos, lo cierto es que todo depende de cada una de sus personalidades.

Así como ocurre con los perros, que existen algunos que son malos y distantes, con los gatos es igual. Aunque muchas veces prefieren estar en soledad y sólo recibir mimos cuando ellos quieren, también son cariñosos. Se encuentran constantemente en búsqueda de una caricia, un beso o de la aprobación para dormir junto a sus humanos.

Esto, quizás, sumado a su comportamiento misterioso y a que muchas personas también lo relacionan con el esoterismo y con características energéticas, los gatos han sido motivo de estudio y de adoración durante muchos años y en diversas civilizaciones.

Sea como sea, claro está que tener animales en los hogares aumenta la energía de las personas, su buen humor y las hace sentir acompañadas y queridas. Pero esto no es algo que ocurra sólo en la actualidad, sino que data de muchos años atrás, remontándonos a las civilizaciones del Antiguo Egipto.

Por eso, en esta oportunidad queremos hablar sobre los gatos y por qué eran considerados en Egipto como animales sagrados, qué características tienen y qué virtudes les eran proporcionadas a estos felinos.

Los gatos, animales sagrados en el Antiguo Egipto

Como se mencionó anteriormente, la adoración de estos animales no es algo que ocurra solo en la actualidad, sino que esto data de muchos años de historia y para eso es necesario remontarse al Antiguo Egipto.

Aunque se cree que los gatos comenzaron a ser domesticados en el año 2000 a. C, cuando las personas los empezaron a ver como animales de compañía, con misteriosos comportamientos y protectores de los espacios, lo cierto es que en el 2004 se hallaron los restos de un felino al lado de un humano en una tumba en Chipre. Esto remite a que esta relación data de 7.500 a. C.

gatos sagrados
Foto: Adobe Stock

Ahora bien, volviendo al tema de la veneración en Egipto de estos animales, es preciso destacar que se debía a varios factores que veremos a continuación.

Relación con dioses. Los egipcios consideraban que estos animales eran la reencarnación de la diosa Bastet, una mujer con cabeza de gato que llevaba una cruz de la vida (ankh), por lo que se la asociaba a la fecundidad, la belleza y la protección. Se la podría relacionar con la diosa griega Artemisa.

También era relacionado con el dios Ra, es decir el símbolo del sol, del origen de la vida y la muerte y de la resurrección.

Es por eso que creían que estos felinos no sólo eran animales divinos, sino que cuidaban los hogares y llevarían amor y fecundidad, tanto para las mujeres como para los hombres. La adoración por los gatos fue tal que en algunos casos se los momificaba cuando morían y se los ha sepultado junto a sus dueños.

Incluso, cuando un gato moría, su familia humana se afeitaba las cejas en señal de luto por la pérdida de estos seres maravillosos. Además, existían leyes que prohibían el maltrato o daño a estos seres, algo de lo que se debería aprender en la actualidad.

Disminución de pestes. Más allá de considerarse seres divinos, lo cierto es que los gatos siempre fueron relacionados a la limpieza no sólo del animal, sino también de los lugares donde viven.

Y es que en el Antiguo Egipto los ratones hacían destrozos en los campos de cereal del Nilo, por lo que contar con estos felinos disminuía mucho la población de los roedores y los estragos que podía implicar esto para la economía del lugar.

También cazaban serpientes, lo que sumado a lo anterior, hacía que se disminuyeran los portadores de enfermedades graves como la peste, por ejemplo.

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La importancia de estos animales fue tal que en el Imperio Nuevo los gatos fueron adiestrados para la cacería de aves, en reemplazo de los perros, que llevaban tiempo de domesticación.

En esta parte del mundo, el gato macho era denominado “myeou”, sobre todo en el Alto-Egipto, en referencia a su maullido, mientras que las hembras se las llamaba “techau”, lo que ha sido grabado en muchas tumbas de mujeres. De allí proviene el nombre “chaus”, que actualmente denomina a un gato salvaje de Egipto y de Asia.

Sin embargo, en la Edad Media todo cambió y apareció la quema de gatos en las hogueras. Los gatos pasaron a ser animales temidos y odiados ya que se creía que eran símbolos del demonio y de las brujas debido a sus hábitos nocturnos, sobre todo aquellos que eran de color negro. Quizás esto tenga que ver con su relación con el esoterismo, las energías y el vínculo con el mundo espiritual, de lo que hablaremos en el siguiente apartado.

En la actualidad esto cambió y pareciera que los gatos vuelven a dominar los hogares y que esto se mantendrá por muchos años más. Su inteligencia y misterio hacen que cautiven las miradas no sólo de quienes los tienen, sino de toda la población.

Los gatos y la espiritualidad

Los gatos son más que animales bonitos y tiernos. Son muchas las personas a lo largo del planeta que sostienen que estos animales están vinculados de alguna manera con el mundo espiritual.

Quizás esto sea una idea que ha quedado de esas civilizaciones egipcias que los vinculaban con los dioses, lo cierto es que se dice que son seres completamente perceptivos y energéticos.

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Foto: Adobe Stock

Según estas personas cuando un gato maulla no quiere decir que quiera mimos o alimento únicamente, sino que hay que prestar atención en qué lugares particulares de la casa lo hace porque pueden percibir no sólo mala energía, sino que también pueden visualizar entidades malignas. 

Una de las teorías es que los gatos se encuentran en permanente alerta, cuidando a sus humanos de las energías negativas y asegurándose que puedan volver al mundo físico luego de dormir, por ejemplo. 

Además, se dice que son capaces de capturar estas energías, angustias, miedos y tristezas y neutralizar todos estos sentimientos y transformarlos en energía positiva. Incluso, se dice que cuando rechazan a ciertas personas es porque pueden sentir estas cargas energéticas bajas. 

Así que ya sabes, si tienes gatos o piensas en tenerlos no sólo te brindarán cariño, ternura y compañía, sino que también te ayudarán a neutralizar toda esa energía negativa que cargas durante el día, en el trabajo y de las personas que te rodean. 

Para aquellas personas que tienen felinos será necesario que presten atención a sus comportamientos, ya que todos tienen una finalidad, una razón de ser, con el simple objetivo de protegerte y cuidarte.

Y tú, ¿conocías por qué los gatos eran considerados sagrados en Egipto? ¿Qué otras características sumarías? ¿Crees en su relación con las energías?

Fuente: El Confidencial, Weekend Perfil y El Comercio.