Desear prosperidad en tu vida es natural: quieres lo mejor para ti y para tus seres queridos. pero no siempre es fácil. La vida está llena de obstáculos que dificultan el acceso al dinero y a una vida más tranquila económicamente hablando.

Sin embargo, siempre puedes apelar a un poco de ayuda metafísica. Como sabrás, el Universo te escucha; y si pides las cosas adecuadamente, te consederá lo que deseas.

Por eso, este ritual es perfecto si quieres atraer la prosperidad a tu vida. Lleva muy pocos materiales, muy económicos, y tiene resultados gigantes.

¿Cuándo hacer el ritual?

Esto es importante: debes realizar el ritual un domingo de luna llena. Puesto que, como sabrás, el poder de la luna llena se relaciona directamente con la abundancia.

¿Qué necesitas?

Los materiales son pocos, sencillos y fáciles de conseguir:

  • 7 Lentejas.
  • Vela de color dorado.
  • Algodón.
  • 1 frasco transparente.

¿Cómo se hace?

Lo primero que debes hacer, es escoger las 7 lentejas. La idea es que busques las más grandes y bien formadas, esas que te transmitan la sensación de que tienen potencial para atraer todo lo bueno.

Una vez que las tengas, apaga las luces del lugar donde te encuentras, y enciende la vela. Siéntate con los pies cruzados y coge las lentejas.

Cierra los ojos e imagina lo que deseas. Recuerda que para hacer un pedido al Universo, la visualización es importante. Visualiza la prosperidad que quieres atraer en tu vida, piensa en ti disfrutando de ella como si ya existiera.

Con esas imágenes en la cabeza, repite esta frase varias veces:

“El dinero entrará a mi vida con toda la fuerza con que germinarán estas semillas”

Sigue en esa posición, visualizando la prosperidad y recitando la frase al universo cuando lo así lo sientas.

Cuando la vela se haya consumido por completo, deposita las semillas en un algodón húmedo. Luego, ponlas dentro del frasco de vidrio y déjalas germinar.

Verás cómo a medida que las semillas empiezan a sacar sus primeros brotes, las cosas en tu vida comenzarán a mejorar y la prosperidad no tardará en llegar.

¿Te animas a intentarlo?

Fuente:

Grahasta