Las situaciones estresantes casi nunca dejan lugar para pensamientos positivos. Estamos tan concentrados en el momento que con frecuencia olvidamos tomar las medidas necesarias para disipar la ansiedad.

En estas situaciones, el poder de la concentración es crucial. Nuestra capacidad para aislarnos del momento ansioso es importante para superar el estrés y seguir adelante. Pero según la Universidad de Arizona, existe un método relativamente fácil que solo requiere de la visualización mental de un rostro: el de tu pareja.

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Para llegar a esta conclusión, el director de la investigación, Kyle Bourassa, ideó un experimento en el que 102 personas introdujeron un pie en agua helada durante ocho minutos. “Es una prueba 100% segura, solo que un poco incómoda, dependiendo de la tolerancia al frío de cada persona”, dijo Bourassa.

A estas personas se las dividió en tres grupos. El primero permaneció con su pareja en la sala durante la prueba. Al segundo, se le pidió que pensara en sus pareja ausente mientras realizaba la prueba. Al tercero, se le solicitó que pensara en cómo había sido su día.

Para los resultados, se consideraron las medidas de presión arterial y variabilidad del ritmo cardíaco antes, durante y después de sumergir el pie en el agua.

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Pensar en tu pareja puede ayudarte a manejar el estrés

Quienes habían contado con la presencia de su pareja registraron un menor cambio de tensión arterial por el estrés del agua helada que los miembros del grupo tres, a los que les habían pedido que pensaran en su día. En cuanto al segundo grupo, su presión arterial se mostró similar al del primero.

Con estos resultados, los especialistas dedujeron que pensar en la pareja es un recurso psicológico beneficioso para la equilibrar la tensión arterial en un momento estresante. “Las investigaciones previas descubrieron que pensar en la pareja era psicológicamente beneficioso, pero este estudio va más allá y sugiere que también tiene beneficios para la salud, explica Bourassa.

En el caso de los solteros, el principio es el mismo: pensar en algún ser querido, como los padres o los amigos. Es el hecho de visualizar a alguien que nos agrada lo que tiene un efecto positivo en nuestro nivel de estrés y ansiedad.

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Fuente:

Huffington Post