Los vecinos del casco histórico de Venecia se despertaron este viernes nuevamente con las sirenas que alertan el “aqua alta”. Desde el miércoles, la ciudad sufre los daños ocasionados por la segunda inundación más grande de su historia. Museos, iglesias, hoteles y comercios se han visto afectados y los daños ya superan cientos de millones de euros.

El gobierno de Italia aprobó el estado de emergencia para la ciudad. Por su parte, el acalde de Venecia, Luigi Brugnaro, informó a través de su cuenta de Twitter que se ha visto forzado a cerrar la Plaza de San Marco para proteger a los habitantes frente al riesgo sanitario.

El miércoles, cuando la ciudad despertó bajo el agua, el alcalde atribuyó la catástrofe a los efectos del cambio climático. Los expertos ratificaron esta afirmación, e indicaron que la marea alta también ha aumentado como consecuencia del calentamiento del Mar Adriático.

Las autoridades encargadas de monitorear las mareas esperan que en el transcurso del viernes se presenten picos de crecidas, junto con una ola de mal tiempo en la región, según reportó AFP. Sin embargo, se espera que los niveles desciendan a 110 o 120 centímetros durante el fin de semana. Deberían alcanzar los 80 – 90 centímetros para ser manejables.

El primer ministro Giuseppe Conte informó que el gobierno italiano destinó 20 millones de euros para realizar intervenciones urgentes en Venecia. Además, se están recibiendo donaciones y contribuciones tanto para residentes como para propietarios que han perdido sus bienes como consecuencia de la inundación.

“Venecia es un orgullo de toda Italia, Venecia es patrimonio de todos, único en el mundo. Gracias a tu ayuda, volverá a brillar”, tuiteó Brugnaro junto con los datos de la cuenta donde se reciben las donaciones.

Fuentes:

AFP

Reuters