El yogurt griego es un alimento que contiene poca azúcar, ofrece más carbohidratos y tiene una acidez que provoca que el organismo lo absorba con mucha facilidad. Debido a cualidades como estas te comentamos qué beneficios aporta el consumo de yogurt griego.

Es muy bueno consumir yogurt griego en el desayuno, así como también de postre o como una merienda. Ya que ofrece nutrientes que contribuyen a la mejora del bienestar. Además, existen varias maneras de prepararlo en casa y son pasos muy sencillos.

¿Cómo es el origen de la receta del yogurt griego?

Las primeras recetas de yogurt ocurrieron por fermentación espontánea. Cuando de manera accidental una bacteria se introdujo en las bolsas de piel de cabra, que eran usadas para transportar la leche fresca. No existe un dato específico que pueda determinar de dónde proviene el yogurt, y menos la receta de yogurt griego. A pesar de esto, hay teorías que sugieren que apareció en Europa oriental hace unos 4500 años.

Es por el aporte nutricional que posee, que el yogurt ha adquirido cierta importancia entre los alimentos más usados para llevar una dieta saludable. Actualmente es posible encontrar una amplia variedad de marcas y tipos de yogures. Entre los nutrientes que posee el yogurt griego se encuentran: Carbohidratos, lípidos, minerales, proteínas y vitaminas.

¿Cuáles son los beneficios del yogurt griego?

Yogurt griego

La principal diferencia que existe entre el yogurt griego y el normal, es que el griego suele filtrarse para eliminar por completo el suero de leche y posee una consistencia mucho más espera. Cuenta con aproximadamente un 10% de grasas, una mayor cantidad de proteínas, pero menos cantidad de hidratos de carbono que el tradicional.

Contiene muchas proteínas

El yogurt griego tiene hasta 4 gramos de proteínas, y se sabe que consumir proteínas todos los días es indispensable para la salud. Debido a las proteínas es posible construir y reparar tanto los músculos como los tejidos. Conforme avanza la edad, será necesaria una mayor cantidad de proteínas que de hidratos de carbono. Consumir un yogurt junto a un puñado de frutos secos en un desayuno o en la merienda, es ideal para contribuir con la alimentación saludable.

Posee probióticos

Estos son microorganismos parecidos a la levadura y a las bacterias, pero que son beneficiosas para el organismo. Viven dentro del sistema digestivo. Un equilibrio de probióticos en el cuerpo es indispensable para que el intestino funcione adecuadamente. Los probióticos son ideales para combatir el estreñimiento, la enfermedad inflamatoria intestinal y la intolerancia a la lactosa.

Tiene vitamina D y calcio

Componentes muy beneficiosos para mejorar la salud de los huesos. El yogurt griego posee hasta 150 mg de calcio y unos 0,38 mg de vitamina D. Consumir alimentos que contengan vitamina D y calcio, son ideales para el crecimiento en los niños, fortaleciendo los huesos en los adultos. Se ha demostrado que el calcio tiene efectos positivos en la masa ósea de las personas, sin importar su edad.

Vitaminas del grupo B

Son ocho las vitaminas que pertenecen al grupo B, que aunque estén dentro de un grupo a menudo trabajan juntas. Todas las vitaminas que forman parte de este grupo, cumplen con funciones únicas y de gran importancia. Normalmente, las más conocidas son la vitamina B6 y B12. Desempeñando un papel fundamental en la salud del cerebro. Si faltan estas vitaminas en el organismo, se altera la química del cerebro, afectando gravemente al comportamiento.

Consumir yogurt griego, ofrece vitamina B6, vitamina B5, vitamina B12 y vitamina B9. Cada una indispensable para contribuir con la mejora de la salud y el bienestar general.

Mejora la digestión

Yogurt griego

Se trata de un yogurt que es muy sencillo de digerir, ya que posee menos cantidad de carbohidratos, comparado con el yogur tradicional. Aparte de esto, su alto contenido en probióticos y bacterias que son saludables, trabajan para remover los residuos de los alimentos que quedan adheridos a las paredes intestinales.

Ayuda con la pérdida de peso

A menudo, el yogurt griego contiene menos grasa que los demás tipos de yogurt y, como se ha mencionado, es un excelente aporte de proteínas. Estas son unos macronutrientes que tienen la capacidad de generar un efecto saciante. Agregar yogurt a las comidas representa una buena forma de permanecer lleno por más tiempo.

De acuerdo con un estudio científico, su consumo regular está relacionado con menos cantidad de grasa corporal, menor ganancia de peso y una circunferencia de cintura más pequeña. Al tener más proteínas que el yogurt normal, ofrece beneficios para las personas que practican alguna actividad deportiva con regularidad.

Disminuye el colesterol

Funciona como un tratamiento natural para combatir los niveles elevados de colesterol. Posee una bacteria beneficiosa llamada Lactobacillus Acidophilus, que actúa contra la síntesis endógena del colesterol malo. Sin embargo, es necesario tener presente que, el yogurt griego tiene que estar acompañado por una dieta equilibrada y la práctica regular de actividad física.

A pesar de esto, otros estudios aseguran que esta clase de bacterias no mejora los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares por colesterol en la sangre. Debido a esto, se recomienda consultar con un médico acerca de la conveniencia de añadir yogurt griego a la dieta.

¿Cómo hacer yogurt griego?

Yogurt griego

Para aquellos que adoran el yogurt griego y no lo consiguen en algún supermercado, deben saber que hay varias formas de prepararlo en casa. De esta manera, se podrá disfrutar de un cremoso yogurt sin preocuparte de no encontrarlo en las tiendas.

Los ingredientes que se necesitan para preparar el yogurt griego son:

  • 500 ml de leche entera a temperatura ambiente.
  • 125 g de yogurt natural a temperatura ambiente.
  • 400 ml de nata para montar a temperatura ambiente.
  • 60 g de leche en polvo entera a temperatura ambiente.

Receta de yogurt griego con yogurtera

La opción más cómoda para preparar yogurt griego es usando una yogurtera. Solo hay que lavar muy bien cada uno de los vasitos con sus tapas y seguir un par de pasos. Ahora bien, lo siguiente es disolver la leche en polvo en la leche entera, añadir la nata, el yogurt natural y mezclar todo con una cuchara. Evitar usar la batidora, puesto que no es necesario que la mezcla adquiera aire.

Repartir la mezcla en cada uno de los vasitos de la yogurtera, tapar, encenderla y dejar que funcione durante toda la noche. En la mañana, apagar la yogurtera, dejar que los yogures se enfríen y colocarlos en la nevera por lo menos cuatro horas antes de poder consumirlos.

Receta de yogurt griego sin yogurtera

Preparar yogurt griego casero no es muy complicado, solo es necesario lograr que la preparación se mantenga a unos 45°C por algunas horas para que fermenten. Y esto es muy simple de conseguir, ya que se puede utilizar un termo. La cantidad de yogurt que se puede hacer va a depender de la capacidad que tenga el termo o también el robot de cocina tipo Thermomix.

Teniendo esto presente, para preparar yogurt griego con un termo, hay que saber con exactitud la capacidad del mismo. Permitiendo saber la cantidad de ingredientes que se deben usar. Una vez se sepa esto, hay que mezclar la leche en polvo, la leche entera y la nata hasta que se alcance una temperatura de 50°C sin pasarse. Puesto que si se sobrepasa esa temperatura, las bacterias mueren y el yogurt no se podrá formar.

Cuando la mezcla haya alcanzado los 50°C, añadir el yogurt natural que debe estar a temperatura ambiente, y mezclar suavemente. Inmediatamente se tendrá que pasar la mezcla a un termo, cerrarlo y se tiene que dejar toda la noche en un lugar cálido. Un excelente sitio podría ser cerca del motor de la nevera.

Receta de yogurt griego con un robot de cocina

También es muy sencillo preparar yogurt casero usando cualquier robot de cocina. Lo principal es introducir la leche entera, leche en polvo y la nata. Mezclar por unos 40 segundos en la velocidad 1. Calentar por 4 minutos a 37°C en velocidad 1, agregar el yogurt y mezclar nuevamente por 40 segundos en la velocidad 3.

Verter la mezcla en vasos de cristal, incorporar 1 litro de agua en el vaso y colocar los vasitos de yogurt dentro de la vaporera. Programar 12 minutos a 100°C en la velocidad 1. Al pasar los 12 minutos, retirar la vaporera y, sin retirar los vasitos de yogurt, se envuelve en trapos de cocina.

Si es posible, introducir en una bolsa térmica, que luego se tiene que colocar en un lugar cálido por unas 8 horas. Pasado ese tiempo, los yogures estarán cuajados. Dejar reposar dentro del frigorífico por lo menos unas 5 horas antes de consumirlos.

[También te puede interesar: Cómo hacer yogurt natural en casa]

Fuentes: Mejor Con Salud, Vitónica, la Opinión.