Desde la ciudad de Concordia en Entre Ríos, Argentina, Rocío Debona ha demostrado que la discapacidad no define su vida ni sus sueños. Diagnosticada con atrofia muscular espinal tipo 2 a los 24 meses, Rocío ha desafiado todas las expectativas y estigmas asociados con su condición genética. A través de su presencia en Instagram, esta joven de 30 años comparte su estilo único y su perspectiva, inspirando a otros y demostrando que los límites no existen cuando se trata de perseguir sus metas.

La atrofia muscular espinal (AME), una enfermedad hereditaria, ataca las neuronas motoras esenciales para el funcionamiento de los músculos esqueléticos, como caminar, hablar y tragar.

Para Rocío, sin embargo, la vida con AME es un recordatorio constante de la resiliencia humana. "Tengo mis días en los que peleo con la enfermedad, pero es solo un momento. Lloro un poco y luego continúo", comparte.

Durante su infancia y adolescencia, Rocío se negó a dejar que la AME la definiera. Disfrutó de todos los aspectos de la vida, desde salir con amigos hasta estudiar, y lo hizo desde su silla de ruedas. Sin embargo, los prejuicios y los estereotipos han sido un obstáculo constante en su camino. A menudo, las personas la malinterpretan, asumiendo que su pareja es su enfermero en lugar de su novio, o cuestionando su capacidad para vivir una vida amorosa y sexual plena.

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Frente a estos estigmas, Rocío defiende con pasión su derecho a una vida sexual y amorosa sin restricciones. Cree que la educación sexual integral (ESI) debería incluir ejemplos de personas con discapacidades para normalizar la diversidad y derribar tabúes. Según Rocío, "el sexo es un mundo amplio y cada uno puede experimentarlo de diferentes formas, incluyendo a las personas con discapacidad".

A través de su cuenta de Instagram, donde tiene más de 14,000 seguidores, Rocío comparte su amor por la moda y su estilo personal. Su pasión por la moda la llevó a convertirse en una asesora de imagen. Su página es un testimonio de su autoestima y confianza, mostrando que la discapacidad no define su belleza ni su identidad.

La moda no solo es una forma de expresión para Rocío, sino también una forma de desafiar los estereotipos y promover la inclusión. Recientemente tuvo la oportunidad de cumplir su sueño de ser modelo en una campaña de lencería. Se siente orgullosa de romper las barreras y demostrar que la sensualidad y la discapacidad no son incompatibles.

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Rocío no solo está cambiando percepciones a través de su presencia en las redes sociales, sino que también está luchando por su propia calidad de vida. Está buscando acceso a un tratamiento llamado Risdiplam, que podría mejorar su situación. A pesar de los obstáculos y los miedos que enfrenta, Rocío insiste en que "no hay que permitir que la AME tome las riendas de tu vida. No hay que prohibirse nada, sino buscar soluciones para todo".

La historia de Rocío Debona es un testimonio de fuerza, determinación y valentía. A través de sus acciones, está redefiniendo los límites y demostrando que cada individuo es capaz de superar cualquier obstáculo, sin importar las circunstancias. Su historia es un recordatorio de que la verdadera belleza yace en la confianza y la autenticidad, y que los desafíos pueden ser trampolines hacia el éxito y la realización personal.

Fuente: Infobae.