Aunque comer es vital, estamos malacostumbrados. Muchas veces no comemos, comemos "al paso", "de golpe", mucho en un momento y nada en otro, etc, etc.

Sumado a esto, que tiene que ver con nuestros hábitos y la costumbre de darle poca importancia a la hora de comer, muchos de los alimentos que tenemos a disposición y que más se publicitan no resultan ser los más saludables. Esto hace que muchas personas "por apuro" o "falta de tiempo" terminen recurriendo a lo más accesible y esto, generalmente, no es lo más nutritivo.

Como consecuencia, casi 2 mil millones de adultos tienen sobrepeso en el mundo y, aunque parezca contradictorio, las personas que padecen obesidad pueden ser desnutridas, justamente porque lo que comen les aporta calorías vacías de nutrientes.

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Para que puedas mejorar tú a nivel personal y en tu día a día, investigadores de la Universidad de Yale (Estados Unidos) señalaron que modificar nuestra forma de pensar sobre los alimentos ya podría hacerte comer mejor. ¿Qué "ejercicios" recomiendan?

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Piensa en negativo sobre los alimentos que no son saludables

A las personas que participaron de la investigación se les pidió que observaran ciertos alimentos por 6 segundos concentrándose en los aspectos negativos: su sabor, textura, propiedades nutricionales, etc.

Luego, al pedirles que clasificaran sus antojos se registró una disminución del 20% de éstos respecto de un grupo de personas que no habían realizado el ejercicio.

Esto es importante a la hora de comer bien porque muchos de los alimentos que más se nos antojan no nos hacen bien en exceso ya que justamente sus ingredientes generan cierta adicción, como las grasas saturadas y los azúcares.

Piensa positivamente en alimentos saludables antes de comer

Los científicos también les pidieron a las personas que participaron del estudio que pensaran, el mismo tiempo, pensando de forma positiva sobre los alimentos saludables.

Como resultado, su apetito por ellos aumentó un 14%.

Esto es fundamental porque se trata de re-educarnos a la hora de comer, de pensar positivamente en lo que estamos incorporando a nuestro cuerpo como una manera de cuidarlo.

3. Entrena tu cerebro para evitar los alimentos no saludables

Los investigadores les pidieron a las personas del estudio que se informaran sobre el impacto negativo de la comida rápida y luego pasaran 15 minutos pensando en los efectos perjudiciales de esos alimentos.

Cuando se les pidió que eligieran entre alimentos saludables y no saludables, se mostraron 7,6% más propensos a escoger la alternativa más sana.

4. Entrena tu cerebro para desear la comida saludable

Del mismo modo, las personas también leyeron sobre los beneficios de los alimentos saludables y vieron fotos de ellos.

Como consecuencia, mostraron un 5,4% más probabilidades de elegir alimentos saludables luego de ese ejercicio.

Aunque puedan parecerte porcentajes bajos, las personas que cambiaron sus elecciones terminaron ingiriendo 107 calorías menos.

"Incluso si tomas una buena decisión al día, eso a la larga puede traducirse en la pérdida de muchos kilos", señaló uno de los investigadores.

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Fuentes:

BBC